Tus manchas son de origen solar o de la edad. El principal causante de la aparición de estas manchas es la acción directa de las radiaciones UVB/UVA en la piel. Este tipo de manchas no desaparecen durante el invierno, sino que persisten a lo largo de todo el año.
Por este motivo, es muy importante un cuidado integral con productos específicos que inhiban la causa, además del uso de fotoprotección los 365 días del año para evitar su aparición.
Para controlar la deshidratación de la zona de las mejillas y mantener controlados tus brillos en la zona “T” es importante que los productos de tu ritual contengan, además, ingredientes activos emolientes que mejoren la hidratación cutánea sin aportar peso a tu piel, vigilando en todo momento el exceso de grasa en la zona de frente, barbilla y nariz.
¡Cuidar tu piel y tus manchas es posible con un tratamiento personalizado!